Vacaciones en la Costa Brava
Cataluña es una comunidad autónoma en el noreste de España. Cataluña tiene un tamaño de unos 32.100 kilómetros cuadrados, la capital es la metrópoli de Barcelona y existen las tres lenguas oficiales catalán, aranés y castellano. Cataluña está dividida en cuatro provincias y tiene 7,5 millones de habitantes.
Las provincias de Girona, Barcelona y Tarragona están todas situadas en el mar Mediterráneo, sólo la provincia de Lleida no tiene parte de la costa.
El paisaje de Cataluña es muy variado. Se extiende desde la alta montaña de los Pirineos hasta extensas playas. En los Pirineos, que se extienden a lo largo de la frontera con Francia hasta el cabo de Creus en el mar Mediterráneo, las cumbres alcanzan alturas de más de 3000 metros.
La montaña más alta de Cataluña es la Pica d' Estats con 3143 metros. El valle central catalán que rodea la capital de provincia de Lleida ocupa gran parte de la comarca. Sin embargo, la mayoría de los turistas prefieren las costas catalanas. El paisaje mediterráneo al norte de Barcelona es variado, con llanuras costeras alternando con tramos montañosos de las montañas costeras, con bahías escondidas para bañarse. A menudo sólo se puede llegar a ellos por medio de la escalada o en barco.
Atractivo litoral con numerosas actividades de ocio
En total, el turista encontrará cerca de 560 kilómetros de costa, que ofrecen suficiente espacio para unas vacaciones de playa relajantes y variadas. Mientras que la Costa Brava norte de Barcelona está dominada por acantilados, al sur de la metrópolis de la Costa Dorada, dominan extensos tramos de playa de arena, que a veces se interrumpen por empinados tramos costeros con pequeñas bahías.
En la Costa Brava y Costa Dorada hay numerosos resorts que ofrecen una amplia oferta de alojamiento. Los destinos turísticos más famosos incluyen Roses, Tossa del Mar, Lloret de Mar en la Costa Brava, Calafell, Salou y Cambrils en la Costa Dorada. En las pequeñas bahías, algunos lugares han sabido conservar su carácter original y el encanto de un pueblo pesquero.
En las playas de los balnearios hay una amplia oferta de actividades. La oferta es completa y todo el mundo puede obtener su dinero de valor, si usted tiene una afición por el surf, buceo o parasailing. En Cataluña, sin embargo, hay muchas otras posibilidades.
Los Pirineos son un paraíso para hacer senderismo. Caminatas por senderos marcados conducen a través de gargantas y densos bosques hasta zonas montañosas por encima de la línea de árboles. Una experiencia especial es el viaje en tren de cremallera desde Ribes de Freser a Núria. Para los amantes de la naturaleza, hay algunos puntos a descubrir. El paisaje montañoso, salvajemente romántico, en torno al Cap de Creus, el inactivo paisaje volcánico de la Garrotxa o el delta del Ebro, merece un desvío.
Visitas de muchas épocas
Cataluña es rica en lugares de interés que son aptos para hacer turismo. Destacan en Barcelona el Barrio Gótico, la Catedral de la Sagrada Familia, que aún se encuentra en construcción, y el Real Astillero, que data de la Edad Media y actualmente alberga el Museo Marítimo.
Tarragona aún conserva una serie de edificios construidos por los romanos. Entre ellos, el anfiteatro o los impresionantes restos de un equiducto.
En Girona, el barrio judío o numerosas termas árabes son destinos dignos de ser visitados. Estos son sólo algunos ejemplos, muchos monasterios, catedrales, castillos y otros bienes culturales para descubrir. Cataluña fue el hogar de grandes artistas cuyas obras se pueden admirar en los museos. Entre ellos están Picasso, Miró, Dalí y el arquitecto estrella Gaudí.
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